¿Qué pensaste cuando te propusieron esta película?
Genial. Primero de todo porque es cine. Yo había visto “Quince días contigo” de Jesús Ponce y deseaba entrar en este proyecto porque siempre aborda temas sociales. Primero de todo pregunte si tendría que hacer acento y ellos me dijeron que no. Una vez allí, todo cambio y término hablando como un chico de Sevilla. Entonces ahí empezó el conflicto y el miedo que tenia por si sabría hacerlo.
Soy catalán, del catalán tenia que pasar al castellano y de ahí al andaluz. Al final terminaba haciendo “Los Morancos”, axial que Jesús me dijo que de eso ni hablar que todo consistía en hablar castellano normal pero quitándole las s y trabajando todo se consigue.
¿Eliges mucho los papeles?
Busco personajes muy cómicos y vivos, que a la vez me ayuden un poco a meterme dentro del papel porque es como soy yo. Por eso esta vez me ha gustado interpretar a alguien que es totalmente antagónico a mí. De los tres es el más tranquilo, el más seguro… Y luego todo es mentira porque precisamente por tener las ideas tan claras no se mueve del banco. Me gusto trabajar desde la tranquilidad.
¿Has cogido alguna referencia en algún amigo o contigo mismo?
Para nada. Yo no me he inspirado en ningún amigo pero si que recuerdo mi época “porreta” en la que me pasaba las horas con los colegas sentado en un banco viéndolas pasar.
¿Hay algo de canalla en ti?
(Risas) Si, y mucho. Soy un canalla total. Un actor tiene que tener punto de todo.
Tienes un físico característico que hace que la gente se acuerde de ti ¿Crees que es por algo en especial?
Por la nariz, supongo. Siempre he trabajado de personajes “colgaos” un gran referente es el Jonhy de “Siete vidas” y ahora el personaje de Marcos en “La familia Mata”, en el que interpreto el papel de un padre pero que no tiene mas de dos dedos de frente. Quizás el físico acompaña bastante. Aun que en el mundo del teatro he interpretado cosas distintas. He hecho de galán, de político. Y en “El Laberinto del fauno” interpretaba a un miliciano. Tengo cara de época. Me puedo acoplar a muchas épocas y eso es algo buenísimo. Tengo una cara difícil porque es difícil de acordar. Pero creo que si han pensado en mi es que se puede sacar cosas bonitas.
En la película, la mujer es el motor que lo mueve todo ¿Qué papel interpreta la mujer en tu vida?
Hablando de mi madre… Nunca me he considerado un mimado ni mucho menos. En el mundo del amor, he tenido amores y desamores. Quizás uno o dos amores fuertes que son los que más me han marcado.
¿Qué es lo que te hace avanzar y seguir en el mundo de la interpretación?
No tirar la toalla y seguir avanzando. Es lo que me gusta hacer y quiero trabajar. Si puede ser toda mi vida. No pido grandes papeles ni grandes directores. Con que me de para pagar, ya me conformo. Como todos viviré entre palacios y fabelas.
¿Cine, Tele o teatro?
Todo. Yo en teatro tengo mucha energía. En cine también se sacar mucho esa energía y en televisión, me pone menos pero también se sacar toda esa fuerza.
Háblame un poco de la familia Mata…
Yo me lo paso en grande. Soy de los que mejor se lo pasa. Me están dando mucha cancha con lo que puedo llevar al personaje por donde quiero. Además, los compañeros son muy buenos. Por ser una serie que ha arrancado de cero, esta teniendo mucho éxito. Empezamos a rodar la segunda temporada el mes pasado y pronto podremos volver a ver los capítulos.
¿No tienes miedo a encasillarte?
Espero que no. Cuando tienes miedo es cuando realmente te estas encasillando. Yo soy un novato en este mundo y aun no se me conoce lo suficiente como para que me encasillen.
Texto y Fotos: Eric Romaguera
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